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Intermediate2025-02-25

Correr: de principiante a maratonista

Desde la primera carrera corta hasta los entrenamientos intensivos

Correr: de principiante a maratonista

Recuerdo el día que decidí empezar a correr. Estaba cansado de sentirme siempre sin energía. Un amigo me contó sobre los beneficios de correr y cómo lo hacía sentir más vivo y feliz. Al principio, no estaba seguro. Nunca había sido un atleta. Pero decidí intentarlo. Me puse mis viejos tenis y salí a la calle. ¡No corrí ni siquiera una cuadra! Me sentí muy frustrado, pero no me rendí. Pensé: 'Si él puede, yo también puedo'.

Mi viaje para convertirme en maratonista no fue fácil, pero cada paso valió la pena. Al principio, solo podía correr por unos minutos. Caminaba mucho entre los tramos de carrera. Pero poco a poco, mi resistencia mejoró. Empecé corriendo dos días a la semana. Luego tres. Después, agregué un día más para estiramientos y ejercicios de fuerza.

Recuerdo mi primera carrera de 5 kilómetros. ¡Estaba muy nervioso! Había mucha gente y la atmósfera era emocionante. Corrí a mi propio ritmo, disfrutando del paisaje y de la energía de los demás corredores. Crucé la línea de meta sintiéndome orgulloso y con mucha energía. Fue una sensación increíble.

Después de la carrera de 5k, decidí fijarme una meta más grande: una carrera de 10 kilómetros. Aumenté la distancia en mis entrenamientos gradualmente. Aprendí sobre la importancia del descanso y la nutrición. Escuchaba mi cuerpo y descansaba cuando lo necesitaba. Comía alimentos saludables para tener energía y recuperarme después de los entrenamientos. Descubrí que la alimentación es tan importante como el entrenamiento.

También aprendí sobre diferentes tipos de entrenamiento. Empecé a hacer carreras de velocidad para mejorar mi velocidad. También hacía carreras largas y lentas para aumentar mi resistencia. Descubrí que la variedad en el entrenamiento hacía que fuera más interesante y me ayudaba a evitar lesiones. Un día, me uní a un club de corredores. Correr con otras personas me motivó mucho. Compartíamos consejos, nos animábamos mutuamente y hacíamos amigos. El apoyo del grupo fue fundamental para mi progreso.

Participé en varias carreras de 10 kilómetros y cada vez me sentía más fuerte y seguro. Empecé a pensar en la posibilidad de correr una media maratón. ¡Era un gran desafío! Aumenté mi kilometraje semanal y empecé a hacer carreras más largas los fines de semana. También aprendí sobre estrategias de hidratación y alimentación durante las carreras largas. Practiqué beber agua y comer geles energéticos mientras corría para evitar problemas durante la media maratón. La media maratón fue un gran paso. Recuerdo el día de la carrera. El sol brillaba y había mucha gente. Empecé lento, conservando mi energía. En el kilómetro 15, me sentí cansado. Mis piernas dolían y quería parar. Pero recordé por qué empecé a correr. Pensé en mi amigo, en mi progreso y en lo lejos que había llegado. Decidí seguir adelante. Continué corriendo, un paso a la vez. Finalmente, crucé la línea de meta. ¡Había corrido una media maratón! Fue un logro increíble. Me sentí exhausto pero muy feliz.

Después de la media maratón, me di un tiempo para descansar y recuperarme. Luego, empecé a pensar en la maratón. 42 kilómetros. ¡Era una distancia enorme! Hablé con mi entrenador y juntos creamos un plan de entrenamiento. El plan era exigente. Tenía que correr muchos kilómetros cada semana. También tenía que hacer entrenamientos de fuerza y estiramientos. Pero estaba decidido a lograr mi meta.

El entrenamiento para la maratón fue muy duro. Hubo días en que no quería levantarme de la cama. Pero sabía que tenía que hacerlo. Correr la maratón era mi sueño. Aprendí mucho sobre mi cuerpo y mis límites. También aprendí a ser disciplinado y perseverante. Descubrí que la mente es muy poderosa. Si crees que puedes lograr algo, es más probable que lo logres.

Un día, durante un entrenamiento largo, tuve una lesión. Me dolió mucho la rodilla. Fui al médico y me dijo que tenía que descansar. Estaba muy decepcionado. Pensé que mi sueño de correr la maratón se había acabado. Pero decidí no rendirme. Hice fisioterapia y seguí las instrucciones del médico. Poco a poco, mi rodilla mejoró. Pude volver a correr, pero tuve que ser muy cuidadoso. Empecé corriendo distancias cortas y luego aumenté gradualmente.

Finalmente, llegó el día de la maratón. Estaba muy emocionado y nervioso. Había entrenado mucho para este día. Me sentía preparado. La carrera fue difícil. Hacía calor y había mucha gente. Pero me mantuve concentrado en mi objetivo. Corrí a mi propio ritmo, escuchando a mi cuerpo. En el kilómetro 30, me sentí muy cansado. Mis piernas dolían y mi mente quería rendirse. Pero recordé a mi familia y amigos, que me estaban apoyando. Pensé en todo el esfuerzo que había hecho para llegar hasta allí. Decidí seguir adelante.

Continué corriendo, un paso a la vez. Los últimos kilómetros fueron los más difíciles. Pero sabía que estaba cerca de la meta. Vi la línea de meta y sentí una explosión de energía. Corrí con todas mis fuerzas y crucé la línea. ¡Había corrido una maratón! Fue el momento más feliz de mi vida. Me sentí orgulloso de mí mismo y de todo lo que había logrado. Había demostrado que con esfuerzo y dedicación, todo es posible.

Correr, desde ser un principiante hasta completar una maratón, me enseñó mucho. Aprendí sobre la importancia de la disciplina, la perseverancia y la confianza en uno mismo. Ahora corro regularmente y disfruto de los beneficios físicos y mentales. Animo a todos a empezar a correr. No importa si eres principiante o atleta experimentado. Correr es una excelente manera de mejorar tu salud y bienestar. Solo necesitas un par de tenis y la voluntad de empezar. ¡Atrévete a correr y descubre todo lo que puedes lograr! La experiencia de correr una maratón me enseñó que puedo superar cualquier obstáculo si me lo propongo. Esta mentalidad me ha ayudado en otras áreas de mi vida, como en mi trabajo y en mis relaciones personales. Ahora soy más resiliente y confío más en mis capacidades. Además, correr me ha permitido conocer a muchas personas interesantes y hacer amigos. La comunidad de corredores es muy solidaria y siempre hay alguien dispuesto a ayudarte y motivarte.

Quiz

¿Cuál fue la primera distancia que corrió el autor?

¿Qué tipo de entrenamiento introdujo el autor para aumentar su velocidad?

¿Qué le motivó a continuar corriendo a pesar de sus dificultades?