Arte en familia: un proyecto divertido
Una aventura creativa con risas y colores
Un día, hace un mes, mi mamá tuvo una idea loca. Ella dijo: "Vamos a hacer arte juntos, en familia!" Todos nos miramos. Papá frunció el ceño y mi hermano, Carlos, se rió. Pero, a mí, ¡me pareció genial! Yo siempre he amado dibujar y pintar. Así que decidí ayudar a mamá a convencer a todos.
Primero, mamá dijo que el arte era divertido. "Podemos hacer lo que queramos", dijo con una sonrisa. Papá se rió y dijo: "¿Como pintar la pared del salón?" Todos reímos. Pero, papá no estaba tan seguro.
Entonces Carlos, que siempre trata de hacer chistes, dijo: "Si pintamos la pared, ¡puede que tengamos un nuevo color! Pero, ¿y si se ve horrible?" A todos nos pareció muy gracioso. Fue entonces cuando se me ocurrió una idea: "¿Por qué no hacemos una pintura grande y la colgamos en la pared, en lugar de pintarla?"
Mamá aplaudió y dijo: "¡Eso es! Será un proyecto especial para todos!" Así que decidimos hacer un arte gigante. Primero, necesitamos materiales. Fui al armario y encontré un montón de cosas. Había papel, pinceles, pinturas y hasta algunos lápices de colores. Estaba muy emocionado. Desde ese momento, cada uno de nosotros tenía una tarea.
Mamá fue a comprar más pinturas. "Queremos colores brillantes", dijo. Papá dijo que él buscaría algo más difícil: una tela grande. Carlos se fue a buscar cartón. "¡Voy a hacer una pintura 3D!" dijo. Todos queríamos algo diferente y divertido.
Cuando regresaron, todos estábamos listos. Tuvimos que mover la mesa del comedor porque necesitábamos más espacio. Mamá puso la tela grande en el suelo. Era blanca y enorme. "¡Wow! Esto es como un lienzo gigante!" grité.
Empezamos a trabajar juntos. Papá quería dibujar un sol gigante. Carlos decía que era muy común. "¿Y si hacemos un sol loco?" sugirió, mientras movía las manos como un loco. Todos reímos mucho. Así que decidimos hacer un sol loco. Papá estaba haciendo rayos en todas las direcciones. Cerró un ojo y con la otra mano, parecía que estaba volando.
Mientras tanto, yo iba a hacer un árbol. Me encanta los árboles. Carlos estaba en el medio, queriendo ayudarme, pero cada vez que trataba de pintar, hacía un lío. Se reía y decía: "¡Yo soy el rey de la pintura!"
Después de un rato, mamá decidió que era momento de un descanso. "Estamos haciendo un gran lío, pero también nos estamos divirtiendo", dijo. Fue verdad. Teníamos pintura en las manos, en la cara y hasta un poco en la ropa. Me miré en el espejo y vi que tenía una mancha verde en la nariz. Todos comenzaron a reírse. Papá dijo: "¡Ahora eres un artista!"
Después del descanso, volvimos al trabajo. Cada uno tenía su parte del arte. Yo seguí pintando el árbol, mientras Carlos decidió hacer una montaña de helado. Papá agregó a su sol unas gafas de sol divertidas. Era un mundo loco y colorido.
Mientras pintábamos, cada vez que alguien se equivocaba, hacíamos una risa. "Oh no, ¡he pintado el cielo de rosa!", gritó mamá, y todos reímos. "Es un cielo feliz!" dijo Carlos. La creatividad no tiene reglas; eso es lo más divertido.
Por fin, después de muchas risas, el sol loco, el árbol y la montaña de helado estaban listos. Miramos nuestra obra maestra. Estaba llena de colores. "Esto es increíble!" dije con emoción. Papá sonreía, y mamá parecía tan feliz. Cada uno de nosotros había dejado un pedazo de nosotros en el arte. Cuando terminamos nuestra obra maestra, decidimos que necesitábamos un lugar especial para mostrarla. "¡Vamos a colgarlo en la pared del salón!" dije, emocionado. Todos estuvieron de acuerdo. Papá se fue a buscar clavos, y mamá se encargó de conseguir martillo. Carlos y yo saltamos de alegría. Esto iba a ser grandioso.
Una vez que tuvimos todo, comenzamos a colgar nuestra pintura. Papá fue el encargado. Con cuidado, colocó los clavos en la pared. "Yo soy el maestro de la construcción también" dijo, haciendo una cara cómica. Momento después, fino, teníamos el arte gigante colgado. Era un espectáculo colorido, lleno de risas y ocurrencias. Nos miramos unos a otros llenos de felicidad.
"¿Qué debería hacer ahora?" preguntó Carlos. "¿Quizás hacer una fiesta de arte para mostrar nuestro trabajo?" Él siempre tiene ideas locas. Pero, de repente, mamá dijo: "¡Eso es! Haremos una fiesta, y invitaremos a nuestros amigos y familiares. Ellos también deben ver esto!"
Así que comenzamos a planear la fiesta. Carlos se encargó de las invitaciones. Las hizo en cartón amarillo brillante y puso dibujos locos en cada una. "¡Gracias, amigos! ¡Vamos a ver el sol loco y la montaña de helado!" decía cada invitación. Tenía un estilo especial. Todos reímos cuando leímos las invitaciones. Era un trabajo divertido.
Luego, mamá se convirtió en la chef. Hizo galletas, cupcakes y un delicioso pastel. "Las galletas son arte también" dijo, mientras decoraba cada una con colores brillantes. Papá ayudó a hacer limonada. Todo tenía que ser colorido y divertido.
La noche de la fiesta, la casa se llenó de risas y gente. Todos estaban impresionados por nuestra obra de arte. Tíos, primos, y amigos decían: "¡Qué colorido y loco!" No podíamos dejar de sonreír. Era un gran éxito.
Al final de la fiesta, todos probaron las galletas y la limonada. A Carlos le gustó mucho la limonada y dijo: "Esto es como un arte en mi boca!" Todos rieron a carcajadas. La fiesta fue inolvidable.
Ahora que todo terminó, mi familia y yo hablamos sobre lo que aprendimos. Aprendimos que hacer arte juntos es especial. La creatividad nos une. Todos tenemos ideas únicas y podemos reírnos de nuestros errores. Mientras mirábamos nuestra pintura, papá dijo: "Tal vez deberíamos hacer esto cada mes". ¡Yo estoy de acuerdo! Haremos un nuevo arte y nuevas risas cada vez.
Así que si quieres hacer arte en familia, aquí están mis consejos: Elige un lugar grande, y también asegúrate de tener muchos colores. Asegúrate de tener un buen espacio para todo. No olvides los suministros necesarios como papel, pintura y pinceles. Si se siente como un gran lío, ¡eso es genial! ¡La risa hace todo mejor! Y recuerda, no hay reglas en el arte, así que deja volar tu imaginación. ¡Puede que descubras que eres un gran artista!