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Beginner2024-11-26

Los estados del agua

Una aventura divertida y educativa sobre el agua

Los estados del agua

Había una vez un niño llamado Tomás. Tomás vivía en un pueblo pequeño donde todo el mundo hablaba del agua. Un día, su maestro dijo algo sorprendente: "El agua cubre el 71 por ciento de nuestro planeta". Tomás pensó que eso era mucho. Era un dato importante porque el agua es esencial para la vida. Sin agua, muchas cosas no podrían existir. Sin embargo, Tomás no sabía mucho sobre cómo cambia el agua y los diferentes estados que tiene.

Después de la escuela, Tomás decidió explorar más sobre el agua. Fue al lago cercano. El sol brillaba y el agua estaba tranquila. Miró alrededor y vio a su amiga Ana sentada al borde del lago. Ana estaba jugando con un poco de agua. Tomás se acercó y le preguntó: "¿Ana, sabes que el agua puede cambiar?" Ana le respondió: "Sí, el agua puede ser líquido, pero también puede ser hielo o vapor". Tomás estaba curioso. "¿De dónde viene eso?" preguntó.

Ana explicó: "Cuando hace frío, el agua se convierte en hielo. Eso pasa porque las temperaturas bajas hacen que las moléculas de agua se acerquen y formen un sólido. Cuando el hielo se calienta, se derrite y se convierte en agua líquida de nuevo. Es un ciclo muy interesante". Tomás pensó mucho sobre lo que Ana dijo. Se dio cuenta de que el agua cambia según la temperatura. Esto es el primer cambio que vimos; la causa era el clima frío y el efecto era el hielo.

Después de un rato, Tomás y Ana decidieron ir a la casa de Tomás para hacer un experimento. Tomás tenía dos botellas. Llenaron una botella con agua y la otra botella tenían hielo. Ana dijo: "Vamos a ver qué pasa cuando dejamos estas botellas fuera. El sol calienta todo". Así que dejaron las botellas afuera. Mientras esperaban, comenzaron a hablar sobre el agua.

Tomás recordó una vez cuando estuvo en la playa. Hizo calor y el agua del océano se sentía muy agradable. A veces, se podía ver vapor sobre el agua caliente. "Eso es vapor de agua," dijo Ana. Ella explicó: "Cuando el agua caliente recibe mucho calor, se convierte en vapor. Esto es el tercer estado del agua. Las partículas se separan y el agua se eleva al aire".

Tomás estaba emocionado de aprender tanto sobre el agua. Miró a su alrededor y vio que también había nubes en el cielo. Dijo: "¡Mira, Ana! Las nubes están hechas de vapor también". Ana asintió y sonrió.

Pasaron varias horas y fue hora de ver qué pasó con sus botellas. Al mirar, vieron que la botella con el hielo ya no tenía mucho hielo. Ana dijo: "Esto es porque el hielo se derritió. La causa fue el sol que calentó la botella y el efecto fue que el hielo se convirtió en agua".

Luego, también vieron que la botella con agua estaba más caliente. Ana sugirió: "Si dejamos esta botella afuera más tiempo, podría cambiar a vapor". Tomás estaba muy interesado. Sabía que el agua podía cambiar de un estado a otro, pero nunca había hecho un experimento así. Estaba aprendiendo mucho y se divertía al mismo tiempo. Aprendió que todo en el mundo tiene una razón, una causa y un efecto. El agua era solo un ejemplo, pero había muchas cosas más que él podía explorar en el futuro. Tomás y Ana estaban muy emocionados con su experimento. Decidieron hacer un segundo experimento. Ana dijo: “¿Qué pasará si ponemos agua hirviendo en la otra botella?” Tomás sonrió y contestó: “¡Buena idea! Podemos ver el vapor directamente.” Entonces, llevaron una olla al fuego y hirvieron agua.

Una vez que el agua estaba muy caliente, llenaron la botella con el agua hirviendo. La botella comenzaba a acumular vapor. Tomás se sorprendió al ver el vapor salir de la botella. Ana dijo: “Esto es porque el agua caliente crea burbujas que se convierten en vapor. El calor es la causa y el vapor es el efecto.” Tomás le preguntó, “¿Qué pasará si cubrimos la botella con una tapa?” Ana pensó un momento y respondió: “La tapa atrapará el vapor y las partículas de agua no podrán escapar.” Así que cubrieron la botella.

Mientras esperaban a que pasara el tiempo, Ana comenzó a pensar en lo que habían aprendido. “El agua puede cambiar de estado por el calor y el frío. Es interesante porque el aire también puede afectar el agua,” dijo Ana. Tomás estuvo de acuerdo. Ellos sabían que cuando hay tormentas, se forma lluvia. La lluvia es agua que cae del cielo, y es una forma de líquido. “Esto es como un ciclo, ¿verdad?” preguntó Tomás. Ana sonrió y dijo, “Sí, se llama el ciclo del agua. El agua se evapora y se convierte en vapor, luego se pone en el aire y forma nubes, y finalmente, vuelve en forma de lluvia.”

Luego de un rato, levantaron la tapa de la botella. El vapor salió rápidamente. Tomás dijo: “¡Mira todo ese vapor! Esto es increíble.” Ana explicó: “El vapor se forma por el calor y se escapa cuando no hay nada que lo contenga.” Ahora entendían bien cómo funcionaba el agua.

Regresaron al lago para hablar sobre el ciclo del agua. Mientras miraban el lago, Tomás le preguntó a Ana, “¿Y qué pasa con el agua que está en el suelo o en ríos?” Ana respondió: “A veces, el agua de los ríos y lagos se evapora también. Cuando hace calor, el agua se calienta. La tierra seca necesita agua, así que el agua se va al aire. Cuando se enfría, forma gotas y puede volver al lago o río.” Tomás sonrió y dijo: “Esto es muy interesante. ¡Todo está conectado!”

Pasaron los días y Tomás estaba ansioso por contarle a su maestro lo que había aprendido. En la escuela, durante la clase de ciencias, Tomás levantó la mano y dijo: “¡Señor! Aprendí sobre los estados del agua y el ciclo del agua!” Su maestro le dio una gran sonrisa. “¡Eso es maravilloso, Tomás! Todos necesitamos entender cómo el agua funciona.” La clase escuchó atentamente mientras Tomás compartía su experiencia con Ana en el lago.

Al final de la semana, Tomás y Ana volvieron al lago para observar el agua nuevamente. Se dieron cuenta de que a veces el agua está calma y otras veces tiene ondas. “Es como el aire,” dijo Ana. “Cuando hay viento, el agua se mueve. La causa es el viento y el efecto es que se forman olas.” Tomás estaba contento. Ahora sabía que todo en la naturaleza tiene una razón, incluyendo el agua. Siempre que observaban, podían aprender más sobre el mundo que les rodeaba.

Quiz

¿Qué porcentaje del planeta cubre el agua según lo que dijo el maestro de Tomás?

¿Cuál es el primer cambio del agua que Tomás y Ana observaron?

¿Qué sucede cuando el agua hirviendo se cubre con una tapa, según Ana?